La
escritura es, finalmente, una serie de permisos que te das a ti mismo
para ser expresivo en cierta manera. Para inventar. Para saltar. Para
volar. Para caer. Para encontrar tu propia forma característica de
narrar e insistir; es decir, encontrar tu propia libertad interior. Para
ser estrictos sin ser demasiado auto-exigentes. Sin detenerse demasiado
a menudo a releer. Permitirse a uno mismo pensar que la obra va bien (o
no demasiado mal), simplemente para continuar. No esperar a recibir un
empujón de inspiración.
S.Sontag
S.Sontag